miércoles, 30 de octubre de 2013

"Los trenes se van al purgatorio" se presentan en el Festival de Teatro Mejillones 2013






Después de la exitosa noche inaugural del III Festival de Teatro Mejillones 2013, en donde se presentó la destacada obra “Amores de Cantina” en el Centro Cultural “Gamelín Guerra”. La Corporación Cultural de Mejillones, Enaex y la Ilustre Municipalidad de Mejillones, invitan a la comunidad a participar de la segunda fecha de este certamen, la cual ofrecerá una función de “Los trenes se van al purgatorio”. Esta obra está basada en la novela homónima del escritor Hernán Rivera Letelier y llevada al teatro por la Compañía de Teatro de la Universidad de Antofagasta.




“Los trenes se van al purgatorio” se presentarán en Mejillones el sábado 09 de noviembre a las 20:00 hrs en la Plaza de armas de la comuna.  Es importante señalar, que esta obra ha sido un rotundo éxito en la capital regional, agotando rápidamente todas las entradas para cada una de sus funciones y por primavera vez saldrá de Antofagasta para presentarse en otro lugra, en este caso Mejillones. Posterior a la función en nuestra comuna, la compañía prepara su participación en el Festival Santiago a Mil 2014. El director de esta compañía, Alberto Olguín nos cuenta como fue el proceso de adaptación y montaje de esta obra:

… “Hace años que quería llevar a escena el libro de “los trenes” de Hernán Rivera Letelier. Hurgando en el pasado, en un periódico local, ya manifestaba mi intención de adaptar y dirigir para teatro LOS TRENES SE VAN AL PURGATORIO. Terminaba el siglo XX y me parecía que el libro contenía sucesos, personajes y atmósferas que habían tocado profundamente mi ser. Este tren que demoraba casi cuatro días en recorrer la mitad de Chile, esa gente que venía en busca de algo o que intentaba recuperar ese algo, esos parajes incomprensibles para quien no los ha vivido-sentido-palpado y esa sensación de que nada acaba, pero que nada empieza a la vez, remecían mi alma de artista. Por otro lado, la estructura del libro y el desafío de poner un vagón de tren sobre un escenario, me parecían tremendamente sugerentes y provocativos.



Sin embargo, caminaron los años. La complejidad de cómo contar la historia, la cantidad de personajes, el alto costo de tener un vagón en escena y otras prioridades teatrales, fueron mermando mi primer impulso. Me quedó, eso sí, una leve sensación de muerte prematura, de viaje sin terminar. Hasta que pasó el tiempo, hasta que pasaron los años y como todo en la vida, el tiempo pasó en mí, los años pasaron en mí. El amor y el dolor pasaron por el que escribe, como todo en la vida. Como a todos en la vida. Y desde el dolor y el amor, apareció una tarde cualquiera, tan impulsivamente, el libro rayado y abandonado.



Mágicamente,  al calor de un café, le comenté a Hernán mi intención de retomar la idea del “los trenes”, contando de inmediato con su venia. Y apañado, y arropado, por mis compañeros del Teatro de la Universidad de Antofagasta, nos dimos a la tarea de llevar al teatro la novela de Rivera Letelier.

Los invitamos a subirnos a este tren, al tren del dolor-amor, al tren de la risa-llanto, al tren del avance y retroceso. Los invitamos a nuestro tren, el de la pampa, el “longino”, el de la esperanza de miles y miles que llegaron… y de los miles y miles que siguen llegando cada día al desierto más seco del mundo”.



Al público interesado en participar de esta obra, se le comunica que no se dispondrán de entradas, por lo tanto se solicita que puedan llegar cerca de las 19:30 hrs a la Plaza para tomar ubicación en las graderías mecano que la organización dispondrá para tal motivo.





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